Las ‘smart cities’ han pasado de ser un discreto grupo de proyectos a liderar una inversión tecnológica significativa a partir de ahora y España no escapa a esta tendencia, su inversión según el programa SHC ascenderá a 150.000 millones en el año 2021, y representa un reto para las sociedades, pero desde la Unión Europea nos advierten que si en el año 2030 dos tercios de la humanidad vivirá ellas y existe tal inversión en todos los países, debemos anticiparnos al futuro, y dotar de herramientas no sólo tecnológicas.
Pero además de esto, existen grandes retos globales, y según reflejan distintos informes en nuestro país, algunos sectores como el educativo, presentan múltiples carencias, no sólo tecnológicas, también innovadoras, y de conexión con el sistema sanitario. Informe COTEC refleja, que el espíritu de transformación en España, es insuficiente para para llegar a ser una sociedad basada en el aprovechamiento del conocimiento. Uno de los caminos para intentar contribuir a paliar esta carencia, a medio y largo plazo, es la educación que tiene una responsabilidad en la creación de futuras ciudadanías.
En esta línea trabaja Sheila Romera Aznar, directora de innovación en Smart H. Citizen Pharmex y su primer Comité S.H.C. Profesora y experto en innovación y Smart education. Miembro experto colaborador en la iniciativa U4SSC. Naciones Unidas. Dirige Observatorio innovación educativa Murcia.
Una experta de origen murciano, cuya carrera comenzó en las aulas, y formando acerca de estos temas a profesorado, pero ahora, abre líneas pioneras en distintos sectores: educación y salud, e investigaciones de máximo rigor en Universidades así como dirige programas innovadores, cuya misión es ayudar a que esas ciudades inteligentes no carezcan de la coherente formación y promoción para la salud que favorezca el desarrollo en futuras sociedades inteligentes.
- ¿El reto más importante para las futuras ciudades tecnológicas y conectadas, será el uso de la tecnología, o cree que hay otros?.
Pues mire, la tecnología debe ser nuestro aliado, pero cómo se construyan las futuras Smart cities será clave para que el planeta sea sostenible.
El reto y por ello tarea difícil, es integrar la innovación que atienda a educación y salud, y conecte con todos los elementos retroalimentándolos, de un territorio inteligente, mejorándolos y formando aprendizajes en ecosistema.
No lo es decorar sólo un espacio con una tecnología sino abrir espacios de colaboración y abrir en concepto de aula, salud y ciudad.
Y a eso estoy dedicando ahora mis esfuerzos y a mejorar ese contexto para futuras generaciones, que crezcan educados y preparados para retos en educación y salud.
Pero le menciono otro reto igual o más importante si cabe que es : la salud del futuro ciudadano. Las enfermedades relacionadas al peor hábito de vida en esta era global, son responsables de 15,9 millones de muertes. Sus principales factores de riesgo son el resultado de las elecciones de estilo de vida, en particular la inactividad física, la dieta alta en grasas, el tabaquismo y el consumo de alcohol, además del sobrepeso y la obesidad. En la Unión europea, las enfermedades cardiovasculares son responsables de más de 2 millones de fallecimientos al año y el cáncer ocasiona una cuarta parte de las defunciones y más de 27 millones de personas padecen diabetes.
Es una obligación de todos, en especial los expertos que dirigimos programas educativos o sanitarios, y de las administraciones, empresas… hacer planes integrales, que sumen todos los esfuerzos, de modo MULTIDISCIPLINAR.
- Las tecnologías pueden ayudar a esa labor pero, ¿no cree que hay un mal uso de las mismas o poca formación?.
Si, así es. Si bien es cierto que se han depositado muchas esperanzas en que un uso masivo de las nuevas posibilidades tecnológicas, permita al sistema educativo español superar el fracaso escolar que nos precede y los malos resultados. Y también en salud, o en otras disciplinas, resultan efectivas, agilizan y democratizan. También es cierto, por otro lado, que la falta de cohesión, falta de programas innovadores multidisciplinares y carencias en innovaciones que rediseñen la educación conectando con el entorno, entre otros mayores problemas, nos frena en integrar correctamente las tecnologías.
A pesar del enorme interés del colectivo sanitario y de la Comunidad Educativa, que realiza esfuerzos y firme intención en adaptarse y formarse, en un sistema lleno de carencias. Así el experto mundial Marc Prensky argumenta que hay una división que separa a los nativos digitales (alumnos) y a los inmigrantes digitales (sus profesores). Los estudiantes dominan el lenguaje digital de los ordenadores, videojuegos e Internet, mientras que los profesores, que se han familiarizado más tarde con estas tecnologías, no tienen un dominio tan avanzado de las mismas.
Pero además no lo dominan en muchos casos de manera correcta. De ahí que se necesiten programas, planes integrales educativos y sanitarios. Innovaciones, recursos y mucho interés por parte de TODOS. Existe según nuestros estudios “Plan Almodóvar SHC 2018” unos datos poco confortantes: En 2030 se multiplicarán las enfermedades derivadas de trastornos por mal uso de la tecnología, que llevarán a cuadros de inactividad, ansiedad, mayor obesidad, que costarán al mundo mundo $ 67.5 mil millones a través de gastos directos de atención de la salud y pérdida de productividad.
- ¿Qué herramientas digitales entonces pueden ser útiles en un plan para un territorio inteligente que cuente con una tecnología sostenible?.
Pues, no sólo la digitalización de la eficiencia energética sino:
Todas las que nos ofrece la web 3.0 y el buen uso de redes o TICs
Uso de las TEP. Las Tecnologías del Empoderamiento y la participación.
Las Metodologías innovadoras y lúdicas: gamificación, flipped classroom.
La ayuda de la neurociencia y la salud emocional es importantísima.
La salud y sostenibilidad rediseñando los contextos de aprendizaje.
La diversidad debe ser nuestra baza, todo en una Smart city es diverso, nada es lineal, todo se conecta, todo se intercomunica. ¿Cómo vamos a segregar a los alumnos y no atender sus capacidades?. Existen programas con los que estamos en trámites de iniciar acciones de atención a la diversidad con alguna universidad.
Tecnologías y potenciar la competencia digital con sus actuaciones (robótica, programación, uso dispositivos..)
- ¿Qué papel tiene la salud en estas ciudades?.
Pues fundamental, e interconectado con otras esferas, ya que debe educarse al futuro ciudadano consciente de su salud como un concepto más allá de la curación o dispensación de fármacos, e involucrando como en el programa en el que trabajo, a todo su ecosistema con el que se desarrollará y formará.
Salud conectada en este caso, se refiere a que el aprendizaje de la salud debe comenzar a ser un aprendizaje colaborativo en línea, en grupo y en tiempo real.
Para ello, se necesita conexión. Entendido en un concepto más allá de una App o Wifi. Conexión con todas las partes de la comunidad a modo nodo: Educación- Universidad- medios de comunicación- ayuntamiento- arquitectos- hospitales- farmacéuticos…
Si hay algo que he aprendido de las personas que me han apoyado, como han sido profesores, expertos, innovadores o grandes profesionales de la industria como de la Multinacional Pharmex, es que la innovación no es algo unilateral. Y si lo es, no es innovación. Por ello, cada uno, tiene una labor y un interés en una parte que mueve su sector, pero todos, para sumar en cualquier gran proyecto de un territorio inteligente, deben tener, una misma visión compartida.
Por ello, sumar adquiere un importantísimo sentido en la concepción de los diseños futuros para la salud. Ya farmacia, hospital, colegio, deben dejar de funcionar por su lado, y las personas que deseen cambiar y mejorar las conductas saludables, deben comenzar a formar equipo.
- Cuéntanos algunas tendencias en educación o en salud, ¿hacia dónde vamos los próximos años?.
Pues es difícil predecir, pero la investigación educativa se basará más en proyectos e incluirá más contenido interactivo para mantenerse al día con las actitudes cambiantes de los estudiantes. Ello puede llevar en años a aulas que se unirán al Internet de las Cosas, a través de una red de dispositivos como wearables que se conectan y comparten datos con otros elementos y sistemas, donde los profesores, estudiantes y dispositivos se pueden llegar a conectar más.
Pero para que ese “más” sea un “mejor”, se debe hacer formando y de modo gradual y coherente, o no sólo se producirá más brecha digital y añadirá más presión a profesionales y profesorado. Y se debe ayudar formando en ello y facilitando, ya que sabemos que a pesar de los avances, aún los responsables de medios informáticos en los colegios públicos, se quejan de la falta de infraestructuras y obran “milagros” cada día. Se necesitan muchos planes y programas integrales que con herramientas y conexión den respuesta a todo eso.
Respecto al futuro sanitario cuenta con grandes avances de la tecnología que continuarán reduciendo el número de visitas físicas que los pacientes necesitan a hospitales y cirugías ambulatorias. Y se crearán modelos de atención médica basado en IA para que puedan recopilar datos continuamente de su cuerpo. Los datos y la inteligencia artificial pueden presentar un gran avance. Pero una vez más nos referimos a la formación, se necesita formación en ello para dar una respuesta adecuada.
El coste de los sistemas sanitario y de asistencia social de la Unión se está incrementando, ya que las medidas de atención y prevención para todas las edades son cada vez más caras y se espera que el número de europeos mayores de 65 años casi se duplique: 151 millones para 2060. Reducir o contener estos costes de manera que no se hagan insostenibles depende, de mejorar la salud a lo largo de la vida y el bienestar de todos. Además, la epidemia más preocupante en pleno siglo XXI en un país desarrollado como España, es la obesidad infantil, derivado de la falta de formación en bienestar y del estilo de vida.
Por todo ello, en Europa, aunque todavía tenemos demasiadas barreras entre la eficiencia, la financiación y la innovación, es cierto que se está viendo la necesidad de centrar el foco en educación y una promoción eficaz de la salud, que respondan a la enfermedad y que es rentable desde el punto de vista de los costes, como se contempla en la “Estrategia Europa 2020”.
Debido a que la educación y la prevención de enfermedades nunca han sido tan urgentes, puesto que los territorios sino se conectan saludablemente y educan serán insostenibles
Sheila Romera Aznar, directora de innovación en Smart H. Citizen Pharmex. Presidenta de Comité S.H.C. Profesora y experto en innovación y Smart education. Observatorio innovación educativa Murcia. Miembro experto colaborador en la iniciativa U4SSC. Naciones Unidas.